El pasado 11 de octubre se conmemoró el día de la
mujer boliviana, acompañado de una curiosa medida gubernamental que otorgaba un
día de descanso a las personas de este género. Erróneamente se cree que la
reivindicación por la igualdad de género puede llevarse a cabo con medidas de
corto plazo de crédito político inmediato. Pero lo cierto es que esas acciones acentúan
aún más el daño que ya hay instituido.